sábado, 7 de agosto de 2010

ADECANA Y LA PERDIZ EN NAVARRA




El Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente ha informado a ADECANA que el estudio que anualmente realiza en colaboración con los acotados acerca de la evolución de la productividad de la perdiz en Navarra arroja unos resultados que indican que ésta continúa su tendencia a la baja. Por ello, el Gobierno de Navarra, como medida coyuntural, ha recomendado evitar la caza de la perdiz roja durante la presente temporada 2010-11 para mantener una población mínima reproductora que permita su conservación y aprovechamiento en años venideros.

El Gobierno de Navarra ha manifestado a los cazadores que, en caso de que los cotos opten por permitir la caza de la perdiz en la próxima temporada y como medida temporal, se limitará a un máximo de dos o tres días de caza de perdiz, según coto y tal y como se indica en el mapa adjunto [PDF 2,91MB].

Ante tal medida, la Asociación de Cazadores Navarros “ADECANA” quiere trasmitir a la sociedad en general y a los cazadores en particular que, como viene indicando al Gobierno de Navarra desde hace muchos años, el hecho de limitar hasta estos extremos el aprovechamiento cinegético de la perdiz, no va a resolver por si solo la dramática situación que está sufriendo la especie reina de la caza menor en la Comunidad Foral de Navarra, ya que es público y notorio que hay otros muchos factores que inciden negativamente en la conservación de nuestra perdiz roja. La caza es uno de ellos, pero desde luego no el mas influyente, ya que está demostrado que en los cotos donde se caza de forma responsable y correcta, la actividad cinegética no es negativa, sino incluso favorable, porque las Sociedades de Cazadores se implican de forma ilusionada en la gestión cinegética durante todo el año, la cual está controlada por los técnicos medioambientales. Si a ello le sumamos que a lo largo del año se realizan diversos conteos de los que se obtiene una estadística fiable de los individuos existentes, los días autorizados de caza con sus estrictos controles de cupo de capturas respetan el aprovechamiento sostenible de la especie.

El factor mas influyente en el descenso de las poblaciones de la perdiz es la degradación del hábitat por la agricultura moderna, aspecto este que Adecana ha venido denunciando ante el Gobierno de Navarra desde su fundación, como lo confirman los diferentes estudios realizados, destacando de ellos los siguientes:

-“Identificación y cuantificación de los efectos de los plaguicidas agrícolas en la perdiz roja en España”’ de la Fundación Biodiversidad el cual ha demostrado que la sospecha de los cazadores sobre ciertos productos agrícolas estaba muy fundamentada.

-“Efecto de la cosecha y empacado en especies cinegéticas” realizado por Gestión Ambiental Viveros y Repoblaciones de Navarra durante 4 años, en el cual se demuestra la incidencia demoledora que esta actividad tiene sobre las aves y sus nidos por destrucción directa y por como los que se salvan quedan expuestos a la prelación desapareciendo el 100% de ellos.

-“Estudio que el IREC está realizando en Navarra sobre “La influencia de la predación sobre la perdiz roja”, a través del cual se está sabiendo que esta es muy importante no tanto por el número de predadores que actualmente hay en Navarra, y que a todas luces es excesivo y algo se tendría que hacer con ello, si no por lo expuestos que quedan los pollos a ellos al no existir diversidad de paisaje y espacios donde defenderse.

-En este mismo sentido van el resto de estudios tanto Navarros como nacionales que el Gobierno de Navarra tiene a su disposición.

Por lo que hasta ahora nos consta, el Gobierno de Navarra no está poniendo el interés necesario para la resolución de este grave problema medioambiental, ya que no olvidemos que la grave situación por la que está pasando la perdiz (lo cual no es mas que un barómetro de lo que realmente está pasando en el campo) no se circunscribe únicamente a las patirrojas, sino que está afectando a la totalidad de las especies tanto cinegéticas como protegidas que existen en Navarra.

Las actuales técnicas de explotación agrícola cuya única finalidad es el aumento de la producción, sin tener en cuenta los costos medioambientales que ello supone, inciden de forma muy negativa en todas las especies animales. Ejemplo de ello son, la mala ejecución de algunas concentraciones parcelarias, el uso y abuso en ocasiones de productos fitosanitarios, la recolección de la cosecha y recogida de la paja de forma inadecuada, etc.

El Parlamento de Navarra aprobó el Plan Estratégico de Caza para las anualidades 2001- 2008, con una importante asignación económica a subvencionar en gran parte con fondos europeos, con el objetivo de mejorar el hábitat y la agricultura sostenible, pero casi nada de esto se ha llevado a la práctica.

La construcción del Canal de Navarra, con los cambios que está suponiendo en los usos agrícolas está afectando de forma importante a la perdiz y al resto de las especies silvestres. A pesar de ello, su Declaración de Impacto Ambiental no hace prácticamente mención alguna a este problema.

Respecto del control de predadores que tanto afectan a la perdiz, muchos de nuestros socios se quejan por las trabas que les está poniendo el Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente. Este año, por ejemplo, ha dejado de conceder permisos para la colocación de los tradicionales y eficaces lazos con tope, promoviendo de forma sustitutiva la caza del zorro con reclamo, método mucho menos eficaz.

A pesar de que la mayor afección de este problema está claramente derivada de una errónea gestión medioambiental y agrícola, el Gobierno de Navarra pretende castigar al único colectivo que en la actualidad está trabajando de forma denodada para solucionar este grave problema que son las Asociaciones de Cazadores, las cuales llevan muchos años dedicando con ilusión, esfuerzo, dinero, tiempo y trabajo en favor de la perdiz en sus cotos, realizando siembras ecológicas, creando y manteniendo puntos de agua y nuevas balsas, imponiéndose restricciones de días de caza, horarios, cupos, contratando guardas, y a pesar de todo esto, ha seguido esa disminución progresiva en su población demostrando claramente que esto es un problema medioambiental.

ADECANA, que siempre ha defendido una caza social, natural, sostenible y respetuosa con el medio ambiente, vive con tristeza y preocupación esta situación que sin ser responsabilidad exclusiva de los cazadores nos afecta solamente a nosotros, y no reconoce el gran esfuerzo que realizamos en defensa de la perdiz, lo cual está provocando el desanimo de los cazadores que si pierden la ilusión dejaran de trabajar en favor de esta especie, empeorando la situación.

Adelantando que en los próximos meses vamos a estar muy pendientes de ello, pedimos al Gobierno de Navarra que estas medidas coyunturales, tan duras, vayan acompañadas de forma inmediata por otras mucho mas importantes, sin las cuales este sacrificio sería inútil, que corrijan los graves problemas de hábitat existentes, ya que de lo contrario asistiremos a la practica extinción de la perdiz roja.

Fuente: ADECANA