En la isla de Gran Canaria hay ahora 6.500 licencias, en torno a 3.000 menos que hace cuatro años
M. P. PÉREZ El periodo en el que se podrá practicar la caza en Gran Canaria, que ahora se extiende de los meses de agosto a octubre, estará fijado a partir de ahora por unos estudios de campo que determinarán el número de especies animales que hay cada temporada en la isla. El Plan Insular de Caza de Gran Canaria, que fue aprobado ayer por el consejo de gobierno del Cabildo insular, viene a ratificar lo que ya venía poniendo en práctica la Consejería de Medio Ambiente, que dirige Juan Salvador León. Precisamente, el logro de este documento, según dijo el consejero es que tras tres años, en los que se ha tenido en cuenta la opinión de los cazadores, se ha logrado dar el visto bueno a la gestión del uso del campo por parte de estos deportistas.
La superficie total en la que se permite la caza alcanza las 139.442 hectáreas con las siguientes excepciones: zonas de seguridad, cotos privados de caza y cualquier espacio que no sea susceptible de este aprovechamiento. Si bien no se fija ninguna zona de coto social, en cuanto a los cotos privados se observa que es una modalidad no enraizada puesto que sólo en 15 se realiza ahora esta actividad mientras que en 1971 llegaban a 23. El citado Plan desvela que los terrenos de aprovechamiento cinegético de Gran Canaria se han visto mermados debido a la que ha descendido la población de conejos silvestres.
En Gran Canaria hay en este momento unas 6.500 licencias de caza, unas 3.000 menos que hace cuatro años debido a que muchos de los que practicaban esta actividad han abandonado porque ha descendido el número de conejos que se pueden capturar. Enfermedades como la mixomatosis o la hemorragia vírica han afectado a esta especie en los últimos años. El último informe revela que el censo ascendía a unos 75.000 ejemplares aproximadamente, cuando lo ideal para una total apertura de la caza en la isla es de 180.000 ejemplares. Por ello, el Consejo Insular de Caza redujo el número de perros acompañantes y lo dejó en cuatro canes por cazador y doce por cuadrilla.
Fuente: laprovincia.es