Los cetreros solicitan un campo de vuelo para unas aves que, tras un decreto regulador han quedado relegadas a pasar los días varadas en su percha. El decreto del Gobierno de Canarias entró en vigor el pasado 3 de enero.
JUANJO JIMÉNEZ. INGENIO
El halcón Sócrates, o el cernícalo americano Ulises, entre otras decenas de aves rapaces, han quedado varadas en tierra tras un "restrictivo" decreto de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias que reduce a la época de caza la posibilidad de hacer un vuelo. Consideradas como aves cinegéticas, las rapaces quedan sometidas al calendario de caza a pesar de que muchos de sus propietarios, según explica Tony Redondo, secretario de la Asociación Canaria de Cetrería, no destinan sus aves a la caza.
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