lunes, 31 de enero de 2011

4.000 cazadores menos en Canarias

La reducción del 20% de licencias no se traduce en un descenso de escopetas.

MIGUEL ÁNGEL AUTERO
SANTA CRUZ DE TENERIFE En Canarias existe un arma por cada 24 personas, esto es 85.383 armas, entre pistolas, revólveres, escopetas, carabinas y rifles y la mayoría de ellas pertenecen a cazadores con licencia. En todo el conjunto del Estado, según los últimos datos oficiales de la Dirección General de Policía y Guardia Civil, hay un arma por cada 14 personas, ya que hay 3.015.900 armas legalizadas.

Sin embargo, según los últimos datos del Gobierno de Canarias, a finales de 2010 eran 21.040 las licencias de caza concedidas en el Archipiélago lo que significa una drástica reducción de casi el 20% de los cazadores que ejercían esta actividad tres años antes, cuando las licencias en vigor eran 24.991 en todo el Archipiélago. La Isla que contaba con más licencias de caza y que ha protagonizado también el mayor descenso de éstas es Gran Canaria que en 2006 tenía 9.640; en 2007, 8.219; en 2008, 7338, y desde 2009, son 6.500 licencias en vigor. Por su parte, la isla de Tenerife ha pasado de tener 9.265 licencias a 8.636 en el último año.

La reducción en las piezas a cobrar por los cazadores, principalmente debido a la aparición de algunas plagas que ha hecho descender el número de conejos, así como el endurecimiento de normativas y la crisis económica, estarían detrás del descenso del número de licencias de caza que se han pedido en los últimos años, pero también tiene que ver el hecho de cada vez son menos los jóvenes que se aficionan a la caza, tal y como señalan los responsables del Servicio de Intervención de Armas de la Comandancia de la Guardia Civil de Santa Cruz de Tenerife.

Armas legales con licencia
Por provincias: en Santa Cruz de Tenerife se contabilizan un total de 37.678 armas, mientras que en la de Las Palmas son 47.705, según los datos de armas correspondientes a las licencias o permisos de armas en vigor a finales de 2010 y que, para la provincia occidental son 22.147. En esta provincia hay registradas 28.286 escopetas, 2.156 carabinas, 1.290 rifles y 2.340 pistolas y revólveres. Mientras que en la provincia oriental figuran legalizadas 32.630 escopetas, 2.475 carabinas, 482 rifles y 2.774 pistolas y revólveres.

El incremento de determinados asaltos o robos como en viviendas así como en negocios de joyería no ha llevado equiparado un aumento del número de solicitudes de licencia para disponer de arma corta para la defensa personal. En Tenerife sólo hay habilitadas con licencia B (particulares, defensa personal) 39 licencias y de ellas sólo 24 tienen pistolas o revólveres. En Gran Canaria, por su parte, la cifra es aún menor y hay 11 licencias de tipo B.

La tenencia de armas de fuego en España está fuertemente controlada por el Ministerio del Interior y nadie puede poseer o llevar una sin el correspondiente permiso o licencia. Se trata de un marco legal que está a punto de endurecerse aún más pero que se ha topado con la oposición de todo el sector, aficionados, armeros y federaciones (de caza y deportivas).

Hasta la fecha, para obtener el documento acreditativo, el interesado debía superar un examen teórico y una prueba práctica; no tener antecedentes penales y, finalmente, superar un reconocimiento médico.

Sin embargo, el Gobierno de España se ha propuesto reformar la legislación vigente sobre el reglamento de armas para adaptarlo a la normativa europea y cuyo borrador se publicó en el BOE el pasado 30 de noviembre, un nuevo marco que se ha criticado desde diferentes asociaciones de cazadores, tiradores deportivos, coleccionistas y propietarios de armerías. Sin embargo, desde la Guardia Civil se indica que la reforma del reglamento actual, vigente desde 1993, es necesaria. El plazo para las alegaciones públicas estuvo abierto, tras una prórroga por la cantidad de alegaciones presentadas, hasta el pasado 22 de enero.

Con el cambio que defiende el Ministerio del Interior se "pretende reordenar el maremágnum" de armas, licencias, permisos especiales, inutilización de armas así como la edad mínima para hacer uso de un arma (no posesión) y que hasta ahora venían siendo los 14 años siempre y cuando el menor fuera acompañado de un adulto con licencias D, E, o F. A partir de ahora la edad mínima para ir de cacería acompañado y usar un arma de caza serán los 16 años mientras que para practicar el tiro olímpico se mantiene en 14 la edad mínima.

Fuente: Laopinión.es