martes, 21 de mayo de 2013

ACONCAEX denuncia el furtivismo

El pasado mes de abril la Asociación para la Conservación de la Naturaleza y la Caza en Extremadura (ACONCAEX), cursó una queja tanto al Delegado del Gobierno en la Región como al Teniente Coronel de la Guardia Civil.

La Asociación para la Conservación de la Naturaleza y la Caza en Extremadura (ACONCAEX), quiere poner en su conocimiento la impunidad con la que los furtivos están delinquiendo en la mayor parte de los cotos de caza de la Comunidad de Extremadura, especialmente en la provincia de Badajoz. La acción de los furtivos se traduce en la captura de especies silvestres cinegéticas o incluso protegidas (aves esteparias), además está provocando cuantiosos daños materiales en las fincas agrícolas donde cazan ilegalmente. Así, es habitual en muchos cotos extremeños sufrir todos los días, da igual que sea mañana, tarde o por la noche, la visita de estos delincuentes, quienes a bordo de potentes todo-terreno se dedican a perseguir a la fauna, y si es de noche instalan en sus vehículos focos luminosos de gran potencia para facilitar la captura de los animales. Es usual observar galgueros cazando en cuadrilla a cualquier hora del día, eligiendo especialmente para cazar las zonas de reserva que los cotos locales destinan para recuperar las especies cinegéticas y donde los socios nunca cazamos. Los daños provocados por estas correrías tanto diurnas como nocturnas no sólo se limitan a dejar las clásicas roderas en los sembrados de los campos; y es que los furtivos galgueros no dudan en adentrase a gran velocidad en viñedos y plantaciones de jóvenes olivos, provocando el arranque de cuajo de las pequeñas plantas, así como la ruptura de los frágiles sistemas de riego por goteo que alimentan a olivos y viñas, en definitiva, arrasando todo lo que encuentran a su paso y cometiendo delitos contra la fauna, previstos y penados en nuestro Código Penal.

A modo de ejemplo en las Sociedades de Cazadores de Hernán Cortés y La Garrovilla han observado que sus zonas de reserva, antes pobladas por unas poblaciones considerables de especies de caza menor, han quedado materialmente arrasadas tras las múltiples visitas de los furtivos.
 

Las Sociedades de Caza que forman ACONCAEX también han remitido numerosas quejas de la grave situación a la propia Junta de Extremadura, sin que por parte de la Administración responsable del cuidado del Medio Ambiente extremeño se haya obtenido respuesta alguna, a pesar de que los medios de comunicación se hicieron eco de ellas; circunstancia esta que agrava el sentimiento de indefensión de las Sociedades de Cazadores, por ello con la remisión de sendos escritos a las Autoridades al principio citadas, les ruegan encarecidamente que de las órdenes oportunas para atajar esta situación que de seguir así acabará con la fauna de muchos cotos de la Región Extremeña.  

Fruto de la denuncia, agentes del SEPRONA se han trasladado a las distintas localidades para interesarse por el problema», comentan desde ACONCAEX.  

Esperamos que las investigaciones y la vigilancia de los cotos asaltados impunemente den pronto sus frutos para terminar con esta lacra impropia del siglo XXI». 

Fuente: UNAC